Frase del día...

No permitido

22 nov 2011

Sea nuestra vida una canción!!!

Alabe el Corno, la Cítara, el Arpa...
Vuelvo a actualizar esto... con otra foto de mis días de peregrinación por tierras francesas, y hoy con motivo del día de Santa Cecilia (virgen, esposa y martir), patrona de la música y los músicos... os regalo esta foto que tomé en la Colina de Parmenia (el mismo sitio donde la anterior foto...).

Creo que de las cosas que más he presumido en mi vida (y son muy pocas) es por mi gusto por la música... incluso me atreví a tratar de tocar la guitarra... al menos pongo casi bien los dedos para casi todos los acordes... la mano derecha para el ritmo... eso es otro cantar... o mejor dicho otro tocar. Tiempo al tiempo.

La foto trataba de sintetizar lo que estaba viviendo en esos días de retiro en la naturaleza, de como la música usada para la oración y en lugares tan bellos como ese, pueden hacer que te sientas tan hijo de Dios como esas hojas secas...

Para adornar este momento, he pensado en una canción de origen religioso, del famoso grupo onubense "Brotes de Olivo". Basándose en el Salmo 150 han compuesto esta original alabanza que comienza un poco "singular" pero que acaba siendo un precioso himno.

Creo que hoy, día de la música, en honor a Santa Cecilia, puedo dar Gracias a Dios por la música, por lo que me ayuda a vivir y por lo que me transmite. Gracias por los músicos que bendecidos por un don especial, son capaces de componer verdaderas obras de arte. Y gracias a los grupos y cantantes, por interpretarlas y transmitir con ellas las alegrías, las tristezas, las esperanzas y los misterios de la vida...

Felicidades a todos los enamorados de la música... hoy es nuestro día.

Te dejo la letra y el vídeo (artesanal y creado por mi con más fotos de Parmenia). Si no se ve al final de la página, pincha en este enlace http://www.masher.com/player.jsp?key=e4efc274-4518-08c1-62c0-0000b6490104&adscheme=0


SEA NUESTRA VIDA UNA CANCIÓN
Salmo 150

Alabe el corno, la cítara y arpa,
el tamboril, las maracas.
El címbalo sonoro, la buena danza
¡Cantad, de Dios, su gran hazaña!
 
Sea nuestra vida una canción
que cante la obra del Señor.
Vean en mi vida a mi Dios
que me trajo a la tierra por amor.
 
La vida entera alabe a Dios,
Padre, Hijo y Espíritu de amor.
Que cante nuestra vida, que cante mi oración,
el canto de mi vida ¡alabe a Dios!
 
Alaben las mentes, ¡también las almas!
los pies cansados tras su pisada.
Los ojos que serenan con sus miradas
¡vivamos todos juntos una sola alma!
 
Que vibren sonajeros, ¡tocad las palmas!
Flauta y violín, suenen guitarras.
Que griten los silencios, susurren las almas,
tornemos las discordias por banderas blancas
 
Pongamos en la vida tan sólo Palabra.
Nazcan nuestras ideas, todas, del alma.
Convoquen a la vida que nos trae Dios-Salva
y él nos ilumine como sol del alba.



1 comentario:

  1. Gran canción que nunca me dajáis cantar... Pues yo la quiero para mí... jeje Los paisajes de Parmenia, chulísimos. Espero que desués de esta experiencia, tu vida sea ahora más canción.

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